Actualidad y agenda

• La revisión del texto original de este plan ha sido refrendada por el Consejo de Patrimonio Histórico 
• Se trata del segundo de los 15 Planes Nacionales que concluyen su renovación desde que se crearon estas herramientas de gestión en los años 90
• Entre sus novedades figura la incorporación de los objetivos de desarrollo sostenible como ejes prioritarios de actuación, los entornos digitales, las personas como centro del concepto de patrimonio y las comunidades patrimoniales como estructuras colectivas para abordar las cuestiones identitarias

El Consejo de Patrimonio Histórico, cuya reunión bianual congregó los pasados 4 y 5 de abril en La Palma a representantes del Ministerio de Cultura y de todas las Comunidades Autónomas, ha aprobado el nuevo texto del Plan Nacional de Educación Patrimonial.

Esta revisión es la segunda que se concluye desde que se planteara la necesidad de adaptar estas herramientas de gestión del patrimonio cultural -15 planes nacionales en la actualidad- a las nuevas normativas vigentes y necesidades de una sociedad en constante transformación. El Plan Nacional de Patrimonio Industrial fue el primer texto revisado en 2016.

Cerca de 40 expertos en la materia, entre representantes de diferentes órganos del Ministerio de Cultura, instituciones públicas de muy diversas Comunidades Autónomas y otros asesores externos, coordinados por el Instituto del Patrimonio Cultural de España, han sometido el antiguo Plan Nacional de Educación y Patrimonio, aprobado en 2013 y pionero en el contexto internacional en este ámbito de la gestión patrimonial, a una completa revisión de su alcance y metodología.

Entre las principales novedades del nuevo texto, que adopta el término “Educación Patrimonial” en su título, fruto de la consolidación y relevancia que el concepto ha adquirido, está la incorporación de tres dimensiones preferentes: los objetivos de desarrollo sostenible como ejes prioritarios de actuación, las personas (la dimensión humana) como centro del concepto de patrimonio y las comunidades patrimoniales como estructuras colectivas para abordar las cuestiones identitarias.

Sus principales objetivos son: la incorporación de los entornos digitales como espacios para la educación y el aprendizaje, seguir impulsando la investigación en materia de educación patrimonial, su innovación, la creación de redes entre profesionales de la gestión cultural, docentes y otros agentes vinculados al patrimonio cultural, y la formación de estos colectivos en la transmisión de los valores patrimoniales.

El Plan establece unas consideraciones metodológicas básicas y criterios metodológicos de actuación para su implementación y los tres programas que se van a desarrollar, centrados en la investigación-innovación, la formación y sensibilización, y la difusión del plan y de la educación patrimonial a las instituciones y a los colectivos implicados.

Fuente: Instituto del Patrimonio Cultural de España